Construir una casa es una de las decisiones más importantes de la vida. Ya sea como primera vivienda o como segunda residencia, el diseño, los materiales y las elecciones que tomes hoy marcarán tu calidad de vida durante años. Por eso, aquí te dejamos una guía con los aspectos clave que deberías tener claros antes de empezar tu proyecto.
¿Primera o segunda vivienda?
Lo primero es tener claro qué uso vas a darle a la casa.
Si es tu vivienda habitual, necesitarás una distribución práctica, buenos aislamientos, un sistema de climatización eficiente y materiales duraderos.
Si es una segunda residencia, probablemente busques un diseño más flexible, fácil de mantener y pensado para estancias esporádicas, fines de semana o vacaciones.
Esta decisión influye directamente en la inversión, el sistema constructivo elegido y los acabados.
¿Qué sistema constructivo elegir?
Hoy en día hay múltiples opciones para construir tu casa, y cada una tiene ventajas según tus prioridades. Estas son las más habituales:
Obra tradicional (ladrillo y hormigón)
✅ Muy extendida y conocida.
⏳ Requiere más tiempo de ejecución.
💸 Costes más variables por imprevistos en obra.
Madera
✅ Buen comportamiento térmico y estética cálida.
⚠️ Requiere mantenimiento y cuidados frente a humedad e insectos.
Prefabricadas o modulares
✅ Rapidez de ejecución.
🔄 Limitación en personalización si son modelos cerrados.
Steel Frame (estructura de acero galvanizado ligero)
✅ Alta precisión y montaje rápido.
✅ Buena durabilidad y comportamiento sísmico.
⚠️ Menor inercia térmica: necesita aislamientos adicionales.
🔄 Menos adaptable en diseño libre, salvo soluciones personalizadas complejas.
Construcción industrializada con estructura metálica (como la de Sistemas DIY)
✅ Estructura de acero de alta resistencia.
✅ Fabricación completa en fábrica → mayor control de calidad.
✅ Montaje rápido en parcela.
✅ Aislamiento térmico y acústico de alto nivel.
✅ Alta eficiencia energética (casas tipo pasiva).
✅ Diseño 100 % personalizado y flexible.
✅ Combinable con cualquier estilo exterior (rústico, moderno, mixto…).
En Sistemas DIY apostamos por esta última opción, porque nos permite ofrecer casas totalmente personalizadas, sostenibles y con ejecución garantizada en tiempos muy reducidos.
El estilo: ¿moderno, rústico o ambos?
El estilo define la personalidad de tu casa. Te ayudará a decidir acabados, colores, tipos de ventanas, tejados, porches...
Las casas rústicas se integran bien en entornos naturales, suelen llevar fachadas de piedra, cubiertas de teja y materiales cálidos.
Las casas modernas apuestan por líneas rectas, fachadas lisas, grandes ventanales y combinaciones de materiales como hormigón, metal o pintura monocapa.
¿Y por qué no una mezcla? Muchos de nuestros clientes combinan elementos rústicos con un enfoque moderno para lograr un resultado único y actual.
Distribución según tus necesidades
La clave está en pensar a futuro:
¿Cuántas personas vivirán en la casa?
¿Vas a teletrabajar? ¿Necesitas un despacho o zona de estudio?
¿Quieres cocina abierta o cerrada?
¿Porche para el verano? ¿Lavandería separada? ¿Garaje?
En nuestras viviendas trabajamos contigo para que cada metro esté bien aprovechado y encaje con tu ritmo de vida. Una buena distribución no se improvisa: se planifica.
¿Qué sistema de calefacción necesitas?
Esto depende de la zona climática y del uso de la vivienda:
🔥 Aerotermia + suelo radiante (frío/calor): muy eficiente, sin combustión, bajo consumo. Ideal para viviendas bien aisladas.
🪵 Estufas de pellets o chimeneas: opción ecológica y acogedora, muy usada en casas de montaña o segunda residencia.
🔌 Radiadores eléctricos o split: para presupuestos más ajustados, aunque menos eficientes en invierno.
Nosotros siempre recomendamos estudiar las condiciones del entorno, el nivel de aislamiento y el tipo de uso previsto antes de decidir.
Otros puntos clave a considerar
✅ Orientación solar: aprovechar la luz natural reduce el consumo y mejora el confort.
✅ Topografía del terreno: un buen estudio de la parcela puede ahorrar mucho dinero y problemas.
✅ Zonas exteriores: porches, terrazas y jardines suman valor y disfrute.
✅ Tiempo de ejecución: nuestras viviendas se construyen en 2 a 4 meses gracias al sistema industrializado.
✅ Eficiencia energética: en Sistemas DIY aplicamos nuestra filosofía Doble A:
A de aislamiento
A de ahorro energético
Con ello, logramos casas pasivas y sostenibles que reducen drásticamente el consumo.
Conclusión
Construir tu casa es más que levantar cuatro paredes: es diseñar tu modo de vida. Por eso es tan importante rodearte de profesionales que te asesoren en cada paso, y elegir un sistema constructivo que se adapte a ti, no al revés.
En Sistemas DIY te acompañamos desde el primer boceto hasta la entrega final, con un modelo ágil, transparente y personalizable.